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La Junta Directiva de la Federación Local de Asociaciones Vecinales, “Sol y Mar” (FLAVE), decepcionada, preocupada e inquieta tras desconvocarse la huelga del servicio municipal de limpieza
La ciudad y sus habitantes, han soportado estoicamente la enésima huelga del servicio municipal de limpieza, que reiteradamente desde hace muchos años se repite cíclicamente, y siempre en fechas cruciales para la economía y bienestar de la ciudad.
Esta situación se hace insoportable para la ciudadanía, puesto que la ciudad se encuentra “secuestrada” mientras se resuelve un conflicto, del que resulta ser el tercero perjudicado. Cuando se desconvoca la huelga, no se informa ni se aclaran las condiciones en que ha quedado el conflicto, como se ha llegado a la posible solución o si es un nuevo parche. Ni una simple manifestación pública de los responsables políticos de la ciudad, ha tenido la ciudadanía.
La ciudadanía merece respeto y una respuesta por parte de quienes en ellos se ha depositado la gestión de los asuntos municipales, ya que es ella quien sufraga con sus impuestos los servicios que debería percibir, y que brillan en muchas ocasiones por su ausencia. Es lo que ha ocurrido en esta ocasión, con el cese de los servicios de recogida de residuos y limpieza de calles y plazas, durante la celebración de una festividad importante, como han sido los carnavales, mostrando, una vez más, una nefasta y lamentable imagen, que ha sido publicitada en todos los medios, y que va a costar mucho esfuerzo, tiempo y recursos volver a recuperar. La situación de pandemia que aún se vive, requería de actuaciones precisas y urgentes por parte del Consistorio; si el servicio contratado no se presta, requerir de manera urgente a la empresa, y si las condiciones sanitarias se degradan, solicitar o llevar a cabo las medidas oportunas para restablecerlas. 11 días en huelga y más de una semana para recuperar cierta normalidad es imperdonable, lamentable y muestra lentitud o falta de gestión.
Desde la Federación, surge la pregunta de hasta cuándo habrá que esperar para que esto se vuelva a reproducir, ya que por las informaciones aparecidas en medios y redes sociales, la cuestión no se ha solventado, quedando pendiente por parte de la empresa, la dotación de medios/maquinarias a los trabajadores para que desarrollen su trabajo. Muestra de ello, es que tras más de una semana desde que se desconvocase la huelga, la ciudad aún no está completamente limpia, no se han retirado todos los residuos de las vías, y además se ha conocido que los residuos retirados están siendo acumulados en un lugar incorrecto, provocando un nuevo problema. ¿Hasta cuándo se va a soportar esto? ¿Cuándo se va a solucionar el problema? ¿Es esto lo que se merece la ciudadanía, por parte de sus gobernantes?
La Federación como representación de la ciudadanía, considera necesario sentarse a hablar, a negociar, a mediar, a poner sobre la mesa cuantas cuestiones relativas a este ámbito sean necesarias, para que de una vez, y con el consenso de todas las partes, se pueda elaborar un pliego de condiciones que cubra todo el servicio de limpieza de la ciudad, sin perjudicar a trabajadores o ciudadanos, y que la empresa no se encuentre con un contrato en precario porque aún no se ha desarrollado ese pliego ni se ha convocado la licitación del servicio.
La ciudad requiere agilidad en las gestiones y previsión; un calendario de vencimientos de los grandes contratos municipales con amplia temporalidad, que cuando se adjudiquen permitan tener unos años para dedicarlos a otros temas, y no contratos temporales o de urgencia, que requieren renovación continua; proyectos preparados para las diferentes convocatorias de subvenciones, para que siempre se pueda optar a ellas, y no se dejen perder por falta de iniciativas. En definitiva, una buena y verdadera gestión, llevada a cabo para mejorar realmente la ciudad y el bienestar de su ciudadanía, consensuada entre todos para que, independientemente del color o las siglas del gobernante, se ejecute correctamente y logre el progreso de la ciudad, y no el estancamiento que viene sufriendo desde tiempo atrás.