Macías entró en la empresa municipal como auxiliar administrativo del área técnica. Más tarde se encargó de realizar lecturas de contadores y pronto fue nombrado inspector de suministro. Al pie del cañón, lucha en esos primeros años de reestructuración de la empresa de aguas, cuando eran pocos empleados y tenían su sede en la calle Aurora.
Ya en 1999 entra a formar parte del Área de Atención al Público, donde fue muy conocido entre sus clientes y ha cumplido con creces la misión encomendada.
Un trabajador eficiente, resolutivo y servicial, será recordado con cariño por sus compañeros.
Ahora Macías podrá dedicarse a sus dos grandes pasiones, la pintura y a disfrutar de su familia.